Ceras Roura cumple en 2012 cien años de historia. Y para celebrar un siglo dedicado a la fabricación y distribución de velas de cera se ha propuesto, como ha explicado su director general, Xavier Roura, “crecer y ampliar sus mercados, sobre todo en el norte de Europa”.

La compañía se creó en 1912, de la mano del capellán Sebastià Roura, que encontró negocio en las velas para liturgia. Así, han pasado cinco generaciones con experiencia artesanal cuya pasión se ha transmitido de padres a hijo. En la actualidad esta empresa familiar ha ampliado mercado en el que se incluyen las ceras perfumadas, las antimosquitos, las decorativas y los productos complementarios. Con una planta de 12.000 metros cuadrados que producen 3.800 toneladas de velas al año -8.000 vasos de velas a la hora- y comercializa con más de 1.500 productos diferentes, Ceras Roura se sitúa en líder nacional en este sector.

Cerró 2011 con una facturación de 9 millones de euros, de los cuales el 20% procede de las exportaciones. Sus previsiones para dentro de tres años es aumentar hasta un 30% el beneficio por la venta en mercados exteriores.

“En la actualidad exportamos a Francia, Italia, Portugal, Grecia y Marruecos, pero queremos centrarnos en los mercados del norte de Europa, sobre todo en Alemania y Dinamarca donde ya tenemos comerciales en busca de distribuidores locales”, cuentan desde la empresa.

En 2011 han invertido 400.000 euros en renovar y mejorar las instalaciones para ofrecer un producto nuevo y diferenciado, con nueva maquinaria para fabricar velas de acabado rústico “que se demanda desde el mercado europeo”, informan desde la empresa. El 2% del beneficio de las ventas lo dedican a I+D+i. Una muestra de ellos son las investigaciones que están llevando a cabo con ceras vegetales de palma y soja para sustituir a las de origen mineral, además de la implantación de unas líneas de producción automatizadas de prensa y extrusión.

Fuente: ICEX