• Seis diseñadores consolidados y emergentes dan forma, textura y color en la primera de colección otoño-invierno.
• La firma, 100% artesanal, nació hace seis meses y ya cuenta con tienda online

Myblüchers nace como el ‘must have’ imprescindible en todos los armarios y colecciones de moda. La firma valenciana reinventa la horma del clásico ‘blücher’ inglés para darle un nuevo sentido, innovador, versátil y de gran calidad. Muestra de ello es el resultado de su primera colección otoño-invierno, fruto de la participación de diseñadores consolidados y emergentes de trascendencia nacional e internacional. Colores, materiales, texturas, pieles exóticas, perforados, pespuntes,
ornamentación, costuras, cordones… se combinan, aparecen y desaparecen, de una forma mágica, estudiada y única.

En cualquiera de sus variantes, de la mano Minerva Portillo, Sandra Freckled, UKE, Eve Angel Suite, Dragomir Krasimirov o Enum, el proyecto se transforma dando la oportunidad a los amantes de la moda de tener una pieza de diseño limitada a un precio low cost. Todos los modelos se adaptan al pie, cuentan en su suela su sello de autenticidad y juegan con la funcionalidad y la bohemia, la personalidad y el atrevimiento, la coherencia y el deseo.
El objetivo de myblüchers es conseguir una colección con una gran diversidad de estilos y con el sello personal de sus autores. Las colecciones cápsula de myblüchers no son las únicas diseñadas por un creador consagrado para otra marca que no es la suya. De hecho, la empresa se ha inspirado en las propuestas de Kenzo para Vans o la de Stüssy Deluxe para Timberland, a la hora de desarrollar su propio concepto de negocio.

Myblüchers comenzó a gestarse hace seis meses y hace tan solo dos semanas que ya está en la calle, con la puesta en marcha de su web y tienda online. Un recorrido fulgurante y con una acogida imparable en el mercado, en el que han tenido gran protagonismo las redes sociales.

Los grandes fuertes de la marca son la calidad y la selección de exquisitos materiales, sin olvidar la apuesta mutua en los diseñadores que forman ya parte de la historia de myblüchers y con los que seguirá trabajando. La firma ya trabaja en las
próximas propuestas, con nuevas versiones junto a caras y nombres conocidos, y pronto lanzará una nueva línea que promete sorpresas y fieles seguidores.

Además, myblüchers tiene un fin solidario. El 0,7% de todas sus ventas va destinado a proyectos benéficos y sociales, con un claro espíritu de responsabilidad y compromiso.

Producción artesanal
Myblüchers está comprometida con un proceso de fabricación artesanal del calzado, forma de vida de la tierra valenciana durante generaciones y generaciones. De ahí que todas las colecciones estén producidas en Elche y cada zapato luzca su sello ‘made in Spain’, parte del éxito y del reclamo de la firma en el mercado.
De este modo, podemos decir que cada zapato tiene su propia historia y personalidad, pasando por las manos de 40 personas a lo largo de todo el proceso de creación, desde la mesa de dibujo a la colocación en la caja para su distribución. Manos expertas e implicadas en el proyecto que miman cada detalle y dan forma a la piel, dando lugar a tan solo 26 pares de zapatos por modelo.

Detrás de Myblüchers
Myblüchers nace por la unión de dos personas complementarias en el trabajo y en la vida. Victoria dirige la parte creativa y Sergio el equipo técnico y ejecutivo. Trabajan así desde hace más de diez años al frente de Fourmi Rose, un estudio de diseño gráfico multidisciplinar, que nació en torno a la media noche en una buhardilla de Valencia.
«Materializamos nuestros pensamientos y los hacemos grandes. Si no existe el camino, nos lo inventamos. No somos una agencia de encargo, somos una agencia de equipo. Detrás de nosotros existen grandes personas con las que hemos establecido una relación, personal y profesional, de largo y fructífero recorrido», explican.
De este modo, del más natural, surgió myblüchers, por una pasión particular de Victoria por calzar el zapato de costura inglesa, junto a la forma de ambos de ver el mundo y pisar por la vida.