Con un clima templado incluso durante el mes de diciembre y un ambiente festivo que se deja sentir en sus calles y plazas, la Navidad convierte a Lisboa en un lugar perfecto donde deslumbrarse con las decoraciones e iluminaciones que embellecen el centro histórico de la ciudad.

Las iglesias se llenan de música y la Plaza del Comercio, o Terreiro do Paço, se convierte en la perfecta anfitriona de esta fiesta, que se prolonga hasta el día de Año Nuevo.

La animación propia de la época da lugar a una atmósfera ideal para hacer las compras de Navidad, en un destino reconocido por su excelente relación calidad/precio. Descubre el regalo ideal para tu familia y amigos recorriendo algunas de las zonas comerciales de la ciudad: de la Baixa-Chiado al Barrio Alto y de Príncipe Real a la Avenida da Liberdade.

En los espacios dedicados a los productos tradicionales de la región, podrás encontrar todo tipo de artículos que combinan calidad y originalidad, como cerámica y porcelana, zapatos, ropa vintage, joyería, música –especialmente fado–, vinos y productos gourmet. Otras sugerencias para hacer regalos característicos, únicos e inolvidables, son las boutiques en las que podrás encontrar grandes marcas internacionales.

Después de este paseo, recupera fuerzas en una cafetería o pastelería con la repostería típica de la época en Lisboa, como el bolo-rei, un pastel hecho con pasas, nueces y frutas confitadas; los irresistibles sonhos o pasteles de nata; o las afamadas rabanadas.

Para los que se decidan a dar la bienvenida al año 2014 en Lisboa, la Plaza del Comercio se convierte la noche del 31 de diciembre en el punto de encuentro de lisboetas y turistas extranjeros para celebrar la llegada del nuevo año. En ella, varios artistas se suben a un escenario habilitado para la ocasión para hacer la cuenta atrás al son de la música, acompañada de las tradicionales uvas pasas y el brindis con champán.