El neuromarketing es un recurso que tiene cómo objetivo de estudio el proceso de compra, la toma de decisiones del consumidor, y lo que ocurre una vez que ha terminado la compra. Persigue estudiar aquellos mecanismos que logren mejorar la conversión del producto/servicio que se está comercializando y monitorizar la respuesta que tienen.

La mayoría de nosotros pensamos que el proceso de compra empieza en el momento en el que el usuario duda sobre si comprar o no, y concluye en el momento en el que se procede con el pago. Pero no es así…

Lo cierto es que el proceso de compra puede empezar en cualquier parte, como puede ser mientras estamos en casa, cuando pasemos por la calle, a la hora de hacer un viaje y no solo cuando estamos delante del producto o servicio. Concluirá tan solo cuando el consumidor tenga claro que ha adquirido lo que buscaba, que puede utilizarlo y beneficiarse de sus bondades.

Toda esta experiencia se incluye dentro de lo que conocemos como neuromarketing.

¿Qué tipos de neuromarketing existen?

El neuromarketing agrupa diferentes técnicas de marketing basándose en los resultados que se quieren conseguir. Por ello, podemos encontrar diferentes tipos:

1.     Visual

Es aquel que se centra en nuestros ojos, en el sentido de la vista. Hace atractivo cualquier producto o servicio indicando palabras como oferta, rebajas, gratis, redondeo de precios, colores, etc.

2.     Kinestésico

Trabaja con el sentido del gusto, tacto y olfato. Por su dificultad de implantación, no se utiliza demasiado, aunque su potencial es enorme para el usuario.

Por ejemplo, se utiliza en perfumerías para que el olor del perfume atraiga a los clientes, o en tiendas de cosmética perfumando las bolsas para que el cliente asocie el olor con la marca.

3.     Auditivo

Finalmente, el neuromarketing auditivo se centra en el sentido del oído para aplicar la estrategia de marketing. Es muy habitual en las tiendas de ropa: en estos comercios encontraremos música rápida que nos anima a comprar, mientras que en un establecimiento en el que se vende ropa del hogar tenemos música más sencilla, para relajarnos.

Algunos consejos para implementar neuromarketing en tu negocio

• Promociones: promociones del tipo 3 x 2 o 50 % de descuento en la segunda unidad suelen funcionar muy bien.
• Opciones: está demostrado que ofrecer diferentes opciones para vender funciona muy bien. Por ejemplo, si quieres venderle ropa a una mujer, muéstrale 30 opciones, mientras que a un hombre tan solo muéstrale 3. En sectores como el tecnológico, ocurre lo contrario.
• Formación: no se puede aprender neuromarketing de la noche a la mañana; lo más recomendado es buscarse una buena escuela de negocios, como Ineaf, en dónde nos podamos convertir en expertos en esta rama del marketing.
• Elección de palabras: elige muy bien las palabras que vas a usar para vender y olvídate de cualquier tipo de charlatanería, ya que el cerebro desconecta ante esta práctica.
• Vende las características: por ejemplo, en lugar de vender un viaje, dedícate a vender la experiencia que este ofrece.

El neuromarketing puede suponer la diferencia entre el éxito o el fracaso de una campaña publicitaria, pero conviene formarse adecuadamente para saber como desarrollarlo.