Por desgracia, durante los últimos meses se ha visto incrementado el robo en los comercios, algo que ha puesto en relieve la necesidad de proteger y ofrecer seguridad a los emprendedores y empresarios que cada día luchan por sacar adelante el negocio.

Ópticas, joyerías, estancos y tiendas de bicicletas o equipaciones deportivas son solo algunos de los establecimientos que más están sufriendo los ataques. En parte, por la facilidad con la que los botines pueden ponerse en el mercado posteriormente sin dejar apenas huella.

Todo esto hace que sea necesario tomar medidas y tener en cuenta las recomendaciones que ofrecen los profesionales.

Según Sicom Seguridad, todo sería más complicado si se tienen en cuenta tan solo algunos puntos clave.

El primero pasa por aprovechar la tecnología e innovación disponible instalando cámaras y dispositivos que permiten controlar, en remoto, tanto las alarmas que se instalen como las imágenes en directo.

Actualmente, gracias a distintas aplicaciones, se dispone de control absoluto del sistema de seguridad desde cualquier móvil o Tablet y a cualquier hora.

“Es necesario instalar la alarma más adecuada para cada caso que tenga una alerta perimetral que sirva incluso de aviso preventivo. A eso debe sumarse que, en caso de que salte y se verifique – por supuesto sería recomendable contar con un servicio que conecte ante la alarma y vea qué ocurre – que es un incidente, que contacte automáticamente con la policía para tratar de frenar el robo” explican.

Previo a esto, además, habrá que hacer una inspección que garantice que la seguridad en el comercio es la correcta. Desde las cerraduras más seguras, pasando por verificar que las rejas o cierres cumplen de forma eficiente su función y sin olvidar, por ejemplo, el contar con una caja fuerte que no esté a la vista y que sirva de depósito antes de sacar todo el efectivo a diario del local.

Prestar atención a la iluminación puede ser también clave. Algo que a priori no parece de seguridad puede suponer una diferencia. Si el local está correctamente iluminado tanto en el interior como el exterior, tanto durante su apertura como en el cierre, puede permitir ver qué sucede en el interior y que cualquiera pueda alertar en caso de ver algo raro.