Estas aquí
Home > Belleza > La higiene facial como base de una piel sana

La higiene facial como base de una piel sana

Contaminación, estrés, la radiación ultravioleta o el sudor son solamente algunos de los factores que pueden hacer que la salud epidérmica se vea comprometida, incluso haciendo lo que muchos llaman apagar el aspecto de la piel.

Pese a que hoy en día existen tratamientos caseros preventivos que se basan en rutinas de limpieza, es clave acudir cada cierto tiempo a hacer un tratamiento de higiene facial que, gracias a las nuevas tecnologías e innovaciones, permiten preparar la epidermis para que la hidratación, salud y aspecto mejoren considerablemente.

Hay una serie de avances que han sido claves para conseguir una higiene y preparación de la piel más profunda. Con los peelings ultrasónicos y los ultrasonidos se consigue una hidratación mucho más eficaz o que los tratamientos, por ejemplo, contra el acné, sean más efectivos al eliminar la suciedad de los poros y las pieles muertas” explican desde Concha Juan Beauty & Spa, un centro especializado en este tipo de tratamientos que cuenta con un innovador método para conseguir una piel más luminosa, sin brillos, con poros cerrados y sin imperfecciones.

En realidad, debe considerarse el paso previo para cualquier otro tratamiento específico que quiera hacerse en rostro y escote. 

Entre sus ventajas se pueden destacar el eliminar la suciedad, la grasa y las células muertas de la superficie de la piel. “Esto puede ayudar a destapar los poros, mejorar la textura de la piel y reducir la aparición de líneas finas y arrugas” explican. 

Peeling y ultrasonidos como base innovadora

La llegada de la tecnología ha supuesto todo un adelanto en este tipo de tratamientos faciales. Los peelings ultrasónicos funcionan mediante el uso de ondas para aflojar y eliminar las células muertas, la suciedad y la grasa de la superficie de la piel. 

Este proceso, apoyado por soluciones enriquecidas, por ejemplo, con ácido salicílico, lo convierten en una opción suave y no invasiva, pero sí muy efectiva para una higiene profunda, por lo que es apto para casi todo tipo de pieles y para destapar los poros, reduciendo la aparición del acné y puntos negros en el rostro. 

A diferencia de los métodos tradicionales de limpieza de la piel, no daña la barrera natural de la piel.

Si a esto sumamos el tratamiento de ultrasonidos así como el masaje de cara y escote la rehidratación de la capa epidérmica gracias a productos específicos para cada piel hace que luzca más lisa, radiante y relajada.

Si a este tratamiento facial se suma uno corporal basado en la maderoterapia, que ayuda a reducir la retención de líquidos y celulitis y a trabaja y remodela áreas con depósitos de grasas localizadas, se consigue una apuesta integral por el bienestar y la salud que permitirá notar resultados espectaculares en poco tiempo” recomiendan.

Top