La moda -infantil, nupcial, íntima, femenina y masculina-, el calzado, los complementos, la marroquinería, la bisutería y la joyería made in Spain han apostado por internacionalizar sus marcas y, fruto del esfuerzo exportador, los beneficios han comenzado a recolectarse por los cinco continentes. Si en 2011 las ventas al exterior, según datos extraídos de ESTACOM, superaron los 13.537 millones de euros, la facturación durante el primer trimestre del año no se ha quedado atrás y se ha logrado incrementar en un 11,8% en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior.  El éxito de nuestras marcas, que han sabido adaptarse no sólo a las últimas tendencias sino a las costumbres y la orografía del mercado en el que penetra. Entre enero y marzo de este año las exportaciones españolas de moda y complementos han facturado 3.875 millones de euros, de los que 1.862 millones proceden directamente del sector de la confección –un 11,6% más que en el mismo periodo que en el ejercicio anterior-.  La vocación internacional de las enseñas españolas atraviesa en estos momentos un estado de madurez que impulsa con éxito el crecimiento en el exterior y, fruto de este esfuerzo, las prendas y complementos con etiquetas made