Las residencias de personas mayores, centros de día y servicio de atención a domicilio en España afrontan serias dificultades para contratar personal cualificado.  La transparencia puede ser una parte de la solución. La confianza y credibilidad que genera la transparencia puede ser un aliciente para el trabajador comprometido con una atención ética y de calidad. La dificultad para contratar personal cualificado en las residencias de personas mayores es hoy en día uno de los principales problemas que afrontan las organizaciones que se dedican al cuidado de personas mayores. Las causas son diversas, pero destacan especialmente la falta de titulados y el hecho de que el convenio colectivo de residencias ofrezca condiciones laborales menos atractivas que los que aplica la sanidad pública.   Al no poder atraer y retener el talento con incentivos económicos, los centros residenciales están recurriendo a mejorar las condiciones de conciliación, a programas de formación de profesionales y a algo que resulta novedoso: la transparencia.   Los grandes grupos residenciales para mayores como Sanitas, Amavir, DomusVi, Orpea, Albertia, Vitalia o Seniors, entre otros, cuentan índices de transparencia superiores al 65% y muchos de ellos llegan al 100%.   El indicador de transparencia fue creado hace ocho años por Inforesidencias.com, portal líder de búsqueda y