La Agencia Valenciana de la Energía recuerda que durante la madrugada del sábado 29 al domingo 30 de octubre, finaliza el horario de verano. De esta forma, a las tres se deberán atrasar los relojes hasta las dos de la madrugada. Este cambio obedece a una directiva de la Unión Europea y su objetivo es ganar horas de luz solar.

Según la Agencia Valenciana de la Energía, el cambio de hora, que se inició el 27 de marzo y finaliza este sábado, permite ganar 135 horas de luz solar y ahorrar en la Comunitat Valenciana un 5,7 por mil en el consumo eléctrico en aquellos sectores que aprovechan la luz solar.

Alicante y Valencia son las provincias que más ahorros consiguen con el cambio de hora, debido a la mayor presencia del sector doméstico y servicios. En la provincia de Valencia el ahorro en el consumo, superior a 38,6 GWh, supone un ahorro económico de 5,8 millones de euros. La provincia de Alicante ahorrará 31 GWh, equivalentes a 4,6 millones de euros, mientras que Castellón, con 9,1 GWh, tendrá un ahorro aproximado de 1,4 millones de euros. 

El ahorro se produce entre los meses de marzo a octubre, ya que en esta época el sol sale antes y se pone más tarde, es decir, los días son más largos. En estos meses se registra el periodo del año en el que la insolación es mayor para los países del hemisferio norte, como el nuestro.

Con la modificación horaria se hace coincidir el inicio de la jornada laboral con el amanecer, aprovechando así mejor la luz natural, con el consiguiente ahorro energético.

De esta manera, dicho aumento de la luz solar supone para la Comunitat Valenciana un ahorro total de energía de 78,7 GWh (gigavatios hora). Este ahorro en el consumo se traduce en un ahorro económico anual en la Comunidad de 11,9 millones de euros. 

El cambio de hora afecta fundamentalmente al consumo doméstico. En total, en el sector doméstico se obtiene un ahorro en el consumo eléctrico cercano al 1%, lo que equivale a unos 9,2 millones de euros.

También se producen ahorros en el sector servicios, principalmente en los establecimientos hosteleros, grandes superficies y centros de ocio. En este sector se estima que se producirá un ahorro de 2,7 millones de euros. Por el contrario, en el sector industrial el ahorro es prácticamente inapreciable, ya que el uso del alumbrado en las factorías es independiente a la luz solar.