Kibo, el semental de elefante africano, ya está a la vista del público en Bioparc Valencia Es noticia 7 octubre, 201314 febrero, 2015 El imponente elefante de casi 6 toneladas de peso que llegó a Bioparc Valencia hace apenas 15 días procedente de Suecia, ha comenzado a explorar el espacio que recrea la sabana. La visión de Kibo es realmente espectacular y todos los valencianos tendrán la oportunidad de acercarse a conocerlo y darle la bienvenida aprovechando la próxima festividad del 9 de Octubre. Lunes, 7 de octubre de 2013.- Todo indica que el macho de elefante africano de sabana (Loxodonta africana) recibido en BIOPARC el pasado 19 de septiembre ha aceptado perfectamente su nuevo hogar. Kibo nació en el Zoo de Hannover, Alemania, en 1977 y ha pasado los últimos 27 años en el zoo de Boras en Suecia, y parece que el agradable clima valenciano ha acelerado su adaptación, pues ya ha realizado sus primeras salidas al recinto exterior de la Sabana. Su aclimatación, tanto a los espacios como a sus nuevos cuidadores está siendo muy positiva y transcurre según lo previsto. Este impresionante paquidermo de cerca de 6 toneladas de peso se ha incorporado a la manada de Bioparc con fines reproductivos. El Programa Europeo de Reproducción de Especies Amenazadas (EEP), consideró como prioritario su traslado con el fin de mantener los grupos reproductores activos y con la necesaria variabilidad genética. Kibo es uno de los pocos machos de probada fertilidad que existen en Europa. De hecho, ya ha engendrado 5 crías: las 3 primeras son hembras, Kwanza en 2001, Pili en 2003 y Panzi en 2005. Su primer hijo, M’Changa nació en 2008 y el último en mayo de este año. El elefante africano de sabana es el mamífero terrestre más grande que existe. A lo largo del siglo XX se produjo en enorme declive en su población por la brutal persecución a la que fue sometido debido al tráfico de marfil. La regulación a nivel internacional del comercio de este producto mediante el convenio CITES, así como la estabilidad de algunos países africanos, ha llevado a la recuperación de las poblaciones del sur de África y a la estabilidad en las del este, mientras que el declive continúa en África occidental, donde se estima que apenas quedan 10.000 adultos, y en descenso. En esta zona del continente, con gran densidad de población humana, a la caza furtiva para alimentar la demanda internacional del marfil, se une la destrucción y fragmentación del hábitat debido a la reconversión del suelo para usos agrícolas o industriales. [youtube]http://www.youtube.com/watch?v=TDSmKwa6Ueg[/youtube] Compartir en Facebook Compartir Compartir en TwitterTweet Compartir en Pinterest Compartir Compartir en Linkedin Compartir Compartir en Digg Compartir