Hasta 3.000 empleos directos (o lo que es lo mismo, los puestos de trabajo correspondientes al 10% de sus habitantes) son generados por el sector del juego online en Gibraltar, la mayor parte de ellos cubiertos por españoles que residen en las áreas alrededor del peñón y que cruzan a diario la verja. Ahora esos empleos corren un serio peligro de desaparecer.

Como parte de un estado miembro de la UE, Gibraltar combinaba por una parte el derecho a la libre circulación de personas y capitales y por otra, como poseedora de un estatus privilegiado por su condición de territorio británico de ultramar, un régimen fiscal propio (no aplican el IVA) que le ha llevado a ser uno de los lugares con mayor renta per capita del mundo y a convertirse en la base de operaciones de un buen número de casas de apuestas deportivas y operadores de juego online.

Esta situación motivaba que un buen número de foráneos (la mayor parte de ellos procedentes de nuestro país) hubiera encontrado trabajo en el pujante sector de las apuestas online, cubriendo puestos administrativos, de diseño y mantenimiento web o atendiendo llamadas de atención al cliente en call centers. Este verdadero paraíso fiscal suponía además, bajo el punto de vista de las autoridades españolas, una verdadera competencia desleal para las empresas de juego online que operaban con licencia en España. El gobierno de Gibraltar cuenta con una oficina especial para dar soporte a las actividades de esas casas de apuestas.

Ahora, como resultado del Brexit y la salida de la Unión Europea, que será efectiva en dos años, se prevé un éxodo de estas casas de apuestas deportivas y operadores de juego online hacia otros países en los que puedan mantener sus ventajas, principalmente Malta.

En las últimas décadas, hasta 35 empresas británicas y multinacionales como Ladbrokes, William Hill, Bwin o Bet365 habían trasladado sus operaciones de apuestas online a Gibraltar, contratando a españoles para dar soporte a sus operaciones. Empleos que con la salida de la UE se ven ahora más que amenazados.

Fuente:NotasdePrensa.es