La industria alimentaria española se afianza en el mercado ruso Es noticia 16 febrero, 201215 febrero, 2012 A pesar de la difícil coyuntura económica internacional, Rusia sigue siendo un mercado muy estable para los productos agroalimentarios españoles. Al consumidor ruso le gusta probar nuevos productos y, salvo excepciones, suele considerar que los alimentos y bebidas importados son de mejor calidad que los locales. El único factor que frena el consumo de los alimentos importados es el precio final, que suele ser como mínimo el doble que el valor de exportación. Las dificultades logísticas del país y las poco favorables condiciones del clima y del suelo, especialmente en las zonas próximas a Moscú y San Petersburgo, principales focos de consumo, son también dos factores clave que contribuyen a la apertura al exterior. Con 144 millones de habitantes, Rusia se ha consolidado como mercado prioritario para las empresas españolas de alimentación. Aunque el mercado tradicional de la industria alimentaria española es la Unión Europea, que concentra cerca del 70% de las exportaciones, Rusia ha ido adelantando posiciones en el ranking de países receptores y en 2010 ocupaba el décimo lugar. Fuera de la UE, se sitúa como el segundo país al que más exporta la industria alimentaria española, detrás de Estados Unidos. La buena marcha del sector en el mercado ruso ha