Kuwait, con 3,6 millones de habitantes, gracias a su elevada renta per cápita y al hecho de importar prácticamente la totalidad de los bienes de consumo, presenta unas oportunidades muy superiores a lo que cabría esperar por el tamaño aparente de su mercado.

La bonanza económica de los últimos años, con alzas en producción y precio del petróleo (principal fuente de ingresos del país) hacen que la distribución comercial y los patrones de consumo estén cambiando de forma muy rápida. El sector de alimentación, un mercado ya de gran interés desde hace tiempo, no es ajeno a esta evolución.