La contaminación del Lago de Sanabria puede amenazar fondos comunitarios para preservar un ecosistema protegido por Europa Empresas 13 noviembre, 201314 febrero, 2015 El Lago es un importante ecosistema europeo que cuenta con las figuras de protección Red Natura 2000, Zona de Especial Protección para Las Aves y Hábitat de Interés Comunitario Prioritario. A la negación de los hechos por la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León, se suma el alineamiento de la Confederación Hidrográfica del Duero (MAGRAMA), que a pesar de sus contradiciones oficiales respecto a la posición de la Junta, también niega la evidencia del proceso contaminante dejando en absoluto abandono un ecosistema único en la península ibérica. Depuradoras fallidas por valor de varios millones de euros, convenios de mantenimiento incumplidos y vertidos anuales de miles de litros de aguas residuales, estarían en la génesis y desarrollo de un presunto delito medioambiental continuado. El consenso de la comunidad científica evidencia que la contaminación del Lago de Sanabria podría ser irreversible si no se adoptan las medidas oportunas y urgentes. Madrid, 12 de Noviembre de 2013. La Estación Biológica Internacional Duero-Douro (E.B.I.) registró el pasado lunes 4 de Noviembre en Presidencia de la Junta de Castilla y León tres estudios científicos (fechados en abril, junio y septiembre de 2013) del equipo coordinado por el Dr. Antonio Guillén Oterino, eminente Doctor en Biología y premio mundial ‘Google Science Fair 2012’, y un manifiesto de conclusiones firmado por más de una veintena de científicos y expertos de España, Portugal, Francia y Suiza, al que se han sumado en los últimos días varias asociaciones ecologistas, el Director del Real Jardín Botánico y también el Jefe del Departamento de Biodiversidad de este mismo organismo dependiente del CSIC y que intervino en la Rueda de Prensa avalando la investigación, así como varios científicos de prestigio mundial como la Dra. Castellví del CSIC, pionera en la investigación microbiológica y Directora de la Estación Biológica Juan Carlos I en la Antártida durante años. Todos ellos corroboran las conclusiones de que la contaminación del Lago de Sanabria podría ser irreversible si no se toman medidas urgentes en infraestructuras de depuración y políticas de saneamiento que paralicen los actuales vertidos de aguas residuales-fecales que se mezclan con el agua del Lago de Sanabria acumulándose en sus sedimentos, un importante ecosistema europeo y una de las joyas naturales de la península ibérica. La EBI entregará hoy en nombre de más de 30 científicos, las conclusiones de la investigación a su Excelencia el Ministro Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, del que depende la Confederación Hidrográfica del Duero, advirtiendo de las irregularidades y graves contradicciones entre las posiciones adoptadas por la Junta y la CHD respecto a la problemática medioambiental del ecosistema. El origen de la actual situación se encuentra en la construcción de depuradoras fallidas por valor de varios millones de euros, convenios de mantenimiento incumplidos y vertidos anuales de miles de litros de aguas residuales, en una supuesta negligente gestión por parte de las autoridades competentes que podría ser calificado como un presunto delito medioambiental continuado por la persistente negación, silenciamiento del problema y abandono. Las investigaciones concluyen que el origen de la contaminación se encuentra en la proliferación de organismos impensables en estas aguas motivados por vertidos residuales de origen humano, que a lo largo de los últimos 13 años, han procedido de los municipios que lo circundan debido a infraestructuras de depuración deficientes y la persistente inacción de las administraciones responsables. Tanto la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, como sus responsables en el Parque Natural que gestiona el Lago, han desoído durante años las advertencias sobre el problema, atacando directamente a quienes se atrevían a denunciarlos. Cronología de hechos de una negligente gestión medioambiental En los años 1998-2000, La Junta de Castilla y León ejecutó con fondos europeos un plan de depuración integral para el Lago de Sanabria con obras por valor de más de cinco millones de euros y la creación de cinco depuradoras en distintos puntos. Los municipios se vieron obligados a recepcionar la obra, aun manifestando públicamente que la consideraba ineficaz, negligentemente ejecutada y mal dimensionada. Las consecuencias aparecen perfectamente documentadas en la hemeroteca de los últimos 10 años, intervenciones en las Cortes de Castilla y León en 2007 y 2011 e informes del Procurador del Común en los años 2003, 2004, 2006 y 2011. En 2001 se firmó un acuerdo tripartito entre la Junta, la Diputación de Zamora y Galende para financiar el elevado coste de mantenimiento de la infraestructura, convenio que se vio incumplido hasta Junio de 2013. El enfrentamiento entre administraciones es reiterado, el mantenimiento se incumple, se establecen nuevas propuestas e inversiones que nunca son ejecutadas y miles de litros de aguas residuales acaban vertidas año tras año en los mismos lugares y por los mismos motivos, mientras los vecinos y visitantes se quejan de la situación. Esto acredita el carácter no-accidental de los sucesos. En 2006 un informe de la consultora INMSA para el Plan de Ordenación de Recursos Naturales encargado por la propia Junta de Castilla y León advierte de los vertidos y las deficiencias de depuración y concluye diciendo que “…el sistema de depuración instalado en las cuatro estaciones depuradoras de aguas residuales analizadas no se adapta a las variaciones estacionales de carga que se producen en este enclave turístico”. Estas conclusiones quedan recogidas en la propia Memoria Anual del Parque Natural del Lago de Sanabria. Junta y la Confederación Hidrográfica niegan los hechos La reciente alerta científica hecha pública por la EBI sobre la problemática, tampoco ha obtenido una respuesta positiva ni por la Junta de Castilla y León ni la Confederación Hidrográfica del Duero (dependiente del Magrama), que pretenden desacreditar las investigaciones sustentadas por la comunidad científica sobre el proceso avanzado de contaminación, negando unos vertidos actualmente activos y que continúan apareciendo diariamente en los medios de comunicación. Los vertidos residuales son una práctica ilegal prohibida y sancionada por la Unión Europea en cualquier ecosistema de la Red Natura 2000, pero es que además, implican una total pérdida de credibilidad para la misma administración medioambiental que gestiona los fondos asociados a este tipo de ecosistemas. La administración autonómica habría invertido millones de euros en una depuración deficiente, sin que ninguno de las administraciones competentes (Servicio Territorial de Medio Ambiente, Fundación Patrimonio Natural, Sociedad Pública de Medio Ambiente de la Junta, Confederación Hidrográfica del Duero, etc) hayan dado la voz de alarma hasta la fecha. Soluciones posibles: EVALUACIÓN-MODIFICACIÓN DEL ACTUAL SISTEMA DE CANALIZACIONES Y DEPURACIÓN, RIGUROSO MANTENIMIENTO, SEGUIMIENTO DE SU EFICACIA Y EVALUACIÓN DE RESULTADOS SOBRE EL ECOSISTEMA, CONTRASTADO POR ENTIDADES INDEPENDIENTES. Las soluciones de carácter técnico indispensables para paralizar la eutrofización del Lago de Sanabria competen a la Junta de Castilla y León y al MAGRAMA a través de la Confederación Hidrográfica del Duero. La Estación Biológica Internacional Duero-Douro, al ser un ente privado y, por tanto, no competente, solo puede realizar recomendaciones en ningún caso vinculantes. No obstante, la EBI considera que las administraciones involucradas, que conocen perfectamente el problema, han realizado años atrás estudios de ingeniería de obras públicas con soluciones viables para detener el problema. Para la definitiva resolución de un problema arrastrado durante 13 años, la E.B.I. considera fundamental resolver de una vez por todas el choque frontal de contradicciones y acusaciones entre las diferentes administraciones por condicionamientos políticos, totalmente ajenos al interés público general y el del ecosistema. Por último, y con carácter general, la EBI quiere manifestar que la alerta medioambiental denunciada públicamente, se ha realizado frente a la inacción prolongada de administraciones fehacientemente informadas del problema y con el único fin de preservar una joya del patrimonio natural español como el Lago de Sanabria, el mayor lago glaciar de la península ibérica. Asimismo, ofrece a las administraciones públicas de cualquier signo político, ahora y en el futuro, toda la información y todos sus recursos disponibles, para ayudar en la mejor solución a esta crisis medioambiental. Compartir en Facebook Compartir Compartir en TwitterTweet Compartir en Pinterest Compartir Compartir en Linkedin Compartir Compartir en Digg Compartir