El director general de Formación y Cualificación Profesional, Felipe Codina, ha asegurado que «uno de los elementos claves para conseguir que la formación de los desempleados sea efectiva es fomentar su autonomía y creatividad, lo que permite mejorar su implicación y motivación». 

Codina ha inaugurado la Conferencia Final del Proyecto reAct que reúne en un foro internacional a expertos de Austria, Holanda, Italia, España, Grecia y Portugal para debatir experiencias y resultados, en torno al tema Equipar a profesores y alumnos para un mundo digital.

Durante su intervención, el director general ha destacado «la importancia de conseguir una formación para el empleo más adaptada a las necesidades de las empresas y que cumpla las expectativas de los alumnos, de modo que se sientan más implicados en el proceso educativo y puedan encontrar una salida laboral cuando finalicen sus estudios». 

Para conseguirlo, según Codina, «es necesario conseguir una mayor implicación del alumnado para que se convierta en una parte activa de su aprendizaje, mediante su participación en actividades creativas, definidas y dirigidas por ellos mismos, que les sean relevantes y vinculadas a sus vidas, mediante el desarrollo de habilidades cognitivas y de pensamiento crítico que les permitan lidiar de forma independiente y autónoma con las demandas sociales y laborales». 

En este sentido, ha apostado por «el desarrollo de actuaciones y programas que fomenten el conocimiento de nuevas experiencias y el intercambio, permitiendo ampliar sus perspectivas y hacerles descubrir otras expectativas o puntos de vista de gente que vive en otros entornos». 

Proyecto reAct

El Proyecto Europeo reAct trata de profundizar en cómo los proyectos más innovadores abordan la creatividad y la autonomía como facilitadoras de la motivación intrínseca, y los desafíos que conlleva la integración de enfoques innovadores en contextos educativos tradicionales.

El proyecto aspira a ayudar a los alumnos a recuperar su motivación por el aprendizaje, tratando de conseguir que el aprendizaje se perciba como una oportunidad a nivel personal más que como una última opción.

Este consorcio está formado por siete socios de seis países (Austria, Holanda, Italia, España, Grecia y Portugal) con amplia experiencia en programas de educación y formación europeos.

Los socios del proyecto son administraciones públicas nacionales y regionales (Conselleria de Educación, Formación y Empleo, CNO ESDICA), instituciones relacionadas con el sistema educativo (TU DELFT), y centros de formación profesional (KEK KRONOS, TR2000, TIBS, BFI TIROL), centrados en la formación de jóvenes y adultos desempleados y especialmente en el uso de las nuevas tecnologías en el ámbito de la educación y la formación